Acuden al Memorial Democràtic de Cataluña para buscar a los fusilados en Monroyo
La Asociación Gavilla Verde ha acudido al Memorial Democràtic de Cataluña para localizar algún dato significativo que ayude a esclarecer el paradero de los restos mortales de nueve personas que en 1947 desaparecieron de la cárcel de Alcañiz y que, supuestamente, fueron fusilados en la carretera de Morella (actual N-232). El Memorial Democràtic de Cataluña es una institución pública integrada en la sección de Desaparecidos y Fosas comunes del departamento de Interior de la Generalitat y cuyo objetivo es la recuperación, conmemoración y fomento de la memoria democrática durante el periodo de 1931 a 1980.
Tras haber facilitado información “importante” de una persona desaparecida en la posguerra y buscada por la Oficina de Desaparecidos de La Gavilla Verde, su responsable, Adolfo Pastor, decidió acudir a este organismo, después de que la búsqueda de las 9 personas que desaparecieron de la cárcel de Alcañiz en noviembre de 1947 haya resultado hasta ahora infructuosa. La fosa común donde supuestamente fueron enterrados en el cementerio de Monroyo apareció vacía cuando se realizaron las labores de excavación, y no constan documentos escritos en el Ayuntamiento de que fueron enterrados allí. Solamente se localizó una carta escrita en los años 50, en la que se pide al carpintero de Monroyo la fabricación de varias cajas de madera, “una grande para poner los huesos de un grupo sin identificar y otra pequeña para poner los de dos personas”, explicó Pastor.
Acudir al Memorial Democràtic de Cataluña es algo así como un último recurso que no dará sus frutos -si es que los hay- hasta que no pasen unos cuantos meses. Al menos ese es el periodo de tiempo que tardó esa institución en facilitar a Gavilla Verde información sobre el paradero de otra persona de la que se había perdido por completo la pista.
La Gavilla Verde busca a Manuel Mas y Bárbara García, de Torre del Compte; a Aurora Piñana, de Aguaviva; a Josefa Bayod, Aurelio Boj y José Mir, de La Ginebrosa; a Eleuterio Simó, de La Fresneda, y a Rogelio Cuartilla y Genero Fuster de Valdeltormo. Son personas desaparecidas en noviembre de 1947 de la cárcel de Alcañiz. Según el documento oficial de la Guardia Civil, fueron liberados, pero ninguno regresó con su familia.
Tras excavar en la fosa común donde supuestamente fueron enterrados en el cementerio de Monroyo -un vecino del pueblo ya fallecido les señaló el lugar- la Asociación siguió varias pistas. Entre otras cosas, entrevistó a la hija del masovero de Mas de la Serra. La ya anciana afirmó que su padre llevó a los fusilados hasta la tapia del cementerio y que ella limpió la sangre del carro los días posteriores.
Los de Manzanera
Por otra parte, la Asociación La Gavilla Verde entregará este mes que viene los restos de los vecinos de Manzanera, Nogueruelas y San Blas que fueron fusilados en Albalat dels Tarongers (Valencia) y cuya exhumación se efectuó este mes de junio pasado. En la extracción de los huesos colaboró el Grupo Societat i Progrès de Valencia, mientras que los trabajos técnicos y de identificación corrieron a cargo del Grupo Paleola, bajo la dirección del doctor forense Manuel Polo, de la Universidad de Valencia.
Fuente: Diario de Teruel
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